A la entrada del Barrio de Quinta Alegre está uno de los grupos escolares del Ave María establecido por el Padre Andrés Manjón y a la izquierda se alzaba la Ermita de San Antón el Viejo, fundada en 1534 por frailes terceros y franciscanos, perdida durante la enclaustración. Aquí también se encuentra uno de los palacios granadinos, de principios del siglo XX, que recibe el nombre del barrio en el que se asienta.